Wednesday, February 25, 2009

Póstumo...para la eternidad.


Lo sabes, lo sabemos nosotros, lo saben ellos, no es el trofeo, es la idea, la interpretación, la carne y el alma, el hecho de simpatizar contigo, de que se nos hiciera atractivo sonreír maquiavélicamente con las comisuras ultrajadas y resquebradas por la sangre seca mientras mentías por el origen de tan macabros caudales salivales.

Porque el héroe terminó siendo ese payaso siniestro que quemaba dinero, símbolo de adoración de una sociedad ignorante, corrupta, asesina, despiadada en el arte de conjugar el verbo tener, sostenida en vigas de compra-venta con columnas vertebrales de mall, un personaje que hacía rebajarse a los hombres a estados instintivos y repugnantes de sobrevivencia, recordándonos la precariedad de nuestras efímeras existencias.

Felicitaciones Heath, El Oscar al mejor actor de reparto no es más que el pago adelantado a los premios que recibirías en tu carrera, cuando te convirtieras en el gran actor que estabas edificando en profundidad, que estabas gestando en la probeta. Interpretar a ese payaso desquiciado era desplazarse mentalmente y lo hiciste, era borrar los contornos delineados cuidadosamente por el lápiz labial de Nicholson, para representar en tu rostro, con sus manchones de maquillaje y rouge, la mente bloqueada, torcida y a mal traer, plagada de imperfecciones coloridas a la vista.

Y tal como tu personaje en algún parlamento perdido del guión, desataste la locura y la nostalgia de recordarte como uno que iba en vías de ser grande.

1 comment:

Les Ombres d'Aquitaine said...

Viejo como estas, un abrazo, increhible lo de Heath, estaba haciendo zapping y justo atrapo el momento, realmente fue algo maavilloso y agradezco no haberlo perdido, GRANDE HEATH!
espero verte este sábado, cuidate viejo!